Si algo tenemos claro es que el SD-WAN es el sucesor del MPLS en conectividad empresarial.
Muchas empresas han comenzado a optar por modelos híbridos de trabajo e implementado el uso de aplicaciones en la nube. Algo que deja atrás la conectividad MPLS, modelo que no está preparado para soportar la adopción a la nube y el teletrabajo entre otros.
Seguir manteniendo la conectividad MPLS en este tipo de cambios de infraestructuras puede ralentizar la gestión de aplicaciones, reducir el rendimiento e incluso llega a exponer la seguridad de los datos en las organizaciones. Lo que supone un atraso en el avance tecnológico de las empresas.
La solución a este problema llega con el SD-WAN, la evolución de las conectividades WAN. Un nuevo sistema adaptado a la evolución de la tecnología y la adopción a la nube.
¿Qué es el SD-WAN?
El SD-WAN se trata de una red de área extensa (WAN) empresarial que utiliza redes definidas por software SDN (Software-Defined Wide Area Network) para determinar la forma más eficaz de enrutar el tráfico a ubicaciones remotas.
Posibilidades del SD-WAN:
Este modelo permite a un administrador de red de una organización programar remotamente dispositivos a través de un controlador central, reduciendo tiempos de aprovisionamiento y minimizando o eliminando la necesidad de configurar manualmente enrutadores tradicionales en la ubicación de las sucursales.
Ventajas de la conectividad empresarial SD-WAN:
- Flexibilidad y escalabilidad
- Sencillez
- Optimización de rendimiento y agilidad
- Seguridad
Un servicio que ha supuesto un gran avance en la conectividad de las organizaciones, que permite una gestión integral de la velocidad de red y sistemas de comunicaciones. Con una gran capacidad de adaptación a tiempos y ubicaciones.
Sobre todo, ofrece una simplificación de las operaciones basadas en un modelo cloud, un modelo que tiende a extenderse en todas las organizaciones.
Sin duda, una pieza más en el puzle de la transformación digital en las empresas.